La defensa indefensa
Héctor M. Magaña
En su columna semanal de Sin embargo Alejandro Páez Varela habló de los hechos más recientes que envuelven a la senadora Xóchitl Gálvez: en un corto periodo de tres semanas (rematando con el caso del plagio de su tesis) la senadora se ha visto atiborrada de noticias que oscurecen sus planes de campaña presidencial por parte del frente opositor de MORENA.
La columna en cuestión no se centra en la figura de la senadora, sino en sus defensores. Ante la avalancha de críticas el equipo de la senadora Gálvez ha decidido crear un plan de respuesta. ¿Qué significa esto? Tal parece que Xóchitl Gálvez no es el personaje que han querido presentar, su comportamiento errático, al igual que sus palabras y sus redes sociales, la condenan de modo fluctuante; no es de extrañar que ahora los voceros hayan decidido ser los ojos, oídos y lengua de Xóchitl, pero lo que si sorprende es que el barco de Frente Amplio está al borde del hundimiento y aun así se niegan a reconocer el craso error que cometieron al nombrar a Xóchitl Gálvez como su candidata.
¿Qué razones explican esta negativa? Probablemente porque ya es demasiado tarde para una acción decisiva. “El PAN quedó con 22.27 por ciento de los votos en 2018 y casi todas las encuestas dicen que tendrá entre 9 y 12 por ciento en 2024, es decir, sacará la mitad si bien le va. El PRI obtuvo 16.40 por ciento en la anterior elección presidencial y ahora la intención de voto lo coloca entre 7 y 8 por ciento, es decir, la mitad. Y el PRD, que tuvo 5.23 por ciento en 2024, ahora enfrenta su desaparición.”
La negativa se extiende no solo a los partidos que conforman Frente Amplio, sino que incluso los inversores (económicos e intelectuales) se han visto en la negación. El tren ya partió y en lugar de llegar a su destino es probable que se descarrile. “No esperen que Claudio X. González reconozca que se equivocó; tampoco Marko, Moreno o Zambrano, o los aguilarescamines o los enriqueskrauces.”
El panorama es oscuro e incierto para ellos: no solo se enfrenta a perder las elecciones sino que se enfrentan a la posibilidad misma de que sus partidos se extingan. La fábula que desarrollaron para ella no cuajó en la ciudadanía, son solo palabras que construyeron un castillo en el aire que ahora el viento se lo lleva. Queda solo una pregunta: ¿Frente Amplio actúo tan erráticamente e irracionalmente porque sus miembros lo son o porque pensaron que la ciudadanía era irracional o errática? Sea como sea, el tren va a estrellarse, quién sabe que podrán rescatar…