Inspiración
POR: Irasel Negrete Ronzón
«El secreto para una vida exitosa es encontrar
nuestro propósito y luego hacerlo»,
Henry Ford.
¿A ti qué te inspira en tu día a día? ¿Lo has pensado?¿Te has detenido a hacer un análisis de aquello que te motiva a crear, a ser genuino e innovador o has actuado de manera repetitiva sin hacer esta reflexión?
Considero que sentirnos inspirados debe ser una cualidad que nos acompañe siempre, porque cuando actuamos a partir de este motor interno, es como si tuviéramos abierto siempre el camino hacia nuestro potencial de manera ilimitada sintiéndonos más libres, más auténticos, más productivos, más seguros y por supuesto más felices.
Si no sabes cómo encontrar la inspiración, debes saber que para que surja debe haber un estímulo positivo, el cual puede venir de cualquier cosa que veamos, escuchemos o vivamos, inclusive pueden inspirarnos otras personas a través de sus historias, es como hacer conexión con algo que nos haga sentir emociones que nos permitan explorar en nuestra área tanto espiritual como emocional de forma que tengamos ese impulso para “hacer” porque, si llegáramos a encontrar la inspiración y no producimos nada con ella, esta se va a esfumar, pero si la utilizamos podremos encontrar un talento, una vocación, una habilidad o un propósito de vida entre otras múltiples posibilidades, ahora bien no hay que confundir la inspiración con la creatividad debido a que la segunda se refiere a lo que llevamos a la acción mientras que la primera es la fuerza o impulso que nace del gozo y que nos lleva a tener esas ideas creativas. Hay quienes dicen que la inspiración emerge del alma, y seguro que así es porque busca la expresión del ser y por ello que es tan valiosa una vez que se encuentra.
En el ámbito educativo es muy imporante que como docentes promovamos en los alumnos experiencias diversas que vayan enmarcadas en estímulos que puedan hacer resonancia con ellos para que poco a poco se vayan permitiendo conocerse; al hacerlo seguramente les irá naciendo el “deseo por ser” y muy probablemente después, también por hacer ya que la inspiración es un ingrediente clave en la generación de una mentalidad de persistencia y éxito porque nace del disfrute.
Recordemos que la inspiración es la llave de la trascendencia porque nos da claridad en lo que queremos, el empuje para lograrlo y el enfoque para nos perdernos enmarcado en la autenticidad que le imprime nuestra personalidad, aunado a todo esto, los psicólogos a Thrash, T. M., y Elliot, A. J. (2003). afirman que, si cultivamos el poder de la inspiración, la mente se fortalece, lo que significa, que desarrollamos aún más la creatividad, la atención, la reflexión, la capacidad de logro, la autocompetencia y reforzamos la autoestima.
Actualmente contamos en las redes con mucho material inspirador del que podemos hacer uso para encender en nosotros mismos la chispa que nos lleve a movernos de manera fluida a partir de la inspiración, además de ello hay libros y personas que resultan realmente inspiradoras, así que se trata de dejarnos sorprender. Una reflexión que me gustó dice: “Para tener una vida inspirada es mejor disfrutar más del camino que del destino. Se trata más de ser que de hacer”, así que aprendamos a disfrutar los momentos, vivirlos sin prejuicios, dejarnos sorprender y mantener abierta nuestra curiosidad. ¡Déjate inspirar!