Ideología política permea el quehacer de la antropología
- Jorge Uzeta Iturbide disertó en el CECC en torno de las paradojas y riesgos al intentar generar conocimiento científico
Por Jorge Vázquez Pacheco* Jorge Uzeta Iturbide, investigador de El Colegio de Michoacán, ofreció la conferencia “Observando a distancia. Algunas cuestiones antropológicas sobre etnografía, ciencia y ética”, en el Centro de Estudios de la Cultura y la Comunicación de la Universidad Veracruzana (UV), el viernes 1 de septiembre.
El especialista abordó la labor de la antropología y las paradojas del trabajo de campo, cuando en varias ocasiones parecen apuntar hacia cuestiones más políticas que sociales. Además, puso énfasis en la relación del antropólogo con los sujetos a los que “llega a importunar” para estudiar las prácticas y los múltiples procesos e interconexiones que le interesan.
Jorge Uzeta indicó que anteriormente y en las poblaciones regidas por usos y costumbres, el antropólogo buscaba la autorización y visto bueno del chamán o el cacique para llevar a efecto su labor. Hoy las circunstancias se han modificado y en muchos lugares del territorio nacional la autoridad la ejerce el crimen organizado, lo cual añade un factor de riesgo al trabajo respectivo.
En otro momento de su exposición, Uzeta Iturbide abordó la naturaleza actual de la antropología, importante por tres razones: primero, porque se levanta sobre la concepción clásica y aún en boga de trabajo de campo; segundo, porque las representaciones etnográficas elaboradas tienen implicaciones tanto científicas como éticas, y finalmente, por el perfil intrínsecamente político de su trabajo.
Ahondó sobre algunas cuestiones que derivan de esos puntos, a fin de argumentar algo que puede resultar polémico: que el compromiso del antropólogo debe estar, por principio, con su propia disciplina y las discusiones en torno a ésta deben ser en términos propiamente académicos y éticos.
“No sé si vendría a derivar en cuestiones burocráticas, aunque seguramente sí”, abundó para luego mencionar que conoce pocos casos en que el investigador realiza estudios con compromiso político, militantes en sí y por causas justas. “No lo veo mal, pero eso no es precisamente lo que genera un conocimiento antropológico”.
En la sesión de preguntas y respuestas, indicó que el asunto ha llegado al extremo de generar una “antropología de la antropología” y hasta de biografías “para conocer mejor la antropología de la antropología”.
Jorge Uzeta Iturbide es licenciado en Antropología Social por la Escuela Nacional de Antropología e Historia, maestro en Antropología Social y doctor en Ciencias Sociales por El Colegio de Michoacán. Colaboración*