¿A quién le conviene la eliminación de México?

COLUMNA EL JUEGO PROFUNDO

POR: Jorge Rosendo Negroe Alvarez

Durante el partido de México contra Arabia Saudí se mezclaron muchas emociones, pasando del derrotismo esperanzador de saber que estábamos casi eliminados, a la gloria de ver como se combinaban los resultados argentinos y polacos que, junto con las anotaciones nacionales, nos daban casi el pase a la siguiente ronda y finalmente, cuando cayó el gol Saudí, al enojo, la tristeza y la frustración de despedirnos de Qatar en la primera ronda, hecho que no ocurría desde hace 44 años, mostrando la crisis que se vive actualmente en el deporte nacional.

Pero además de a los rivales mundialistas ¿a quién le conviene la eliminación Tricolor? Para contestar esta pregunta debemos pensar no en una si no en varias respuestas, que bien pueden ser la misma pero desde distintos niveles de análisis.

En nuestra realidad actual el futbol está politizado, la Liga Mx se compone de un grupo de empresarios que controlan un negocio millonario basado en el deporte, el cual parece preocuparse más por las ganancias que por el desarrollo deportivo en México, lo cual se ve reflejado en decisiones que toman como quitar el ascenso/descenso a la liga inferior o preferir a jugadores extranjeros que a nacionales.

En otro nivel, entendemos que existe una asociación popular contradictoria de la Selección, por un lado, con el carácter social de la identidad mexicana, donde nos sentimos incluimos y representados viviendo y sufriendo sus partidos; pero por el otro, también es vinculada con las elites, con el manejo y la dictaminación de los poderosos, lo que nos hace sentirnos lejanos, inconformes y desfazados. Nos hace amar y odiar a la Selección, nos hace criticarla y defenderla.

Vemos como el dirigente de la Federación Mexicana de Futbol Yon de Luisa o el de la Liga Mx Mikel Arriola son personajes arraigados al poder de la derecha, con carreras realizadas en las altas esferas de televisa y en la política pública respectivamente, también recordemos la cercanía de la Selección con los Presidentes de la República, que venía desde el “abanderamiento” en la entonces exclusiva casa de Los Pinos hasta sus reuniones para ver los partidos de la representación nacional en los Mundiales (como la famosa foto de Peña Nieto celebrando el gol de México ante Camerún).

Esta vertiente de “exclusividad” fue quebrantada por AMLO, quien prefirió apoyar al Beisbol nacional y darle cabida a otros deportes, reduciendo presupuestos, quitando privilegios y demarcando a la Selección con esa aura de empresa neoliberal que le dan sus actuales dirigentes.

La eliminación de México no le conviene a las empresas patrocinadoras nacionales, pues no contarán con presencia de marca en un espacio televisado donde converja el “espíritu nacional”, aunque quizá si lo harán en el resto de las pocas transmisiones que se dan por televisión abierta. Tampoco le conviene a la FEMEXFUT, pues sus pobres resultados los dejan expuestos y criticados (aunque en realidad a ellos ni les importe).

Y aunque se supone que la eliminación de México también afecta al gobierno del país, la realidad es que, gracias a su desvinculación hacia el futbol, a su enfoque en otros temas (y otros datos), al fracaso de una selección controlada por “los fifís” pareciera que a la 4T realmente le conviene.

Hubo un par de memes al respecto que andan circulando y me dieron mucha risa, por lo que voy a citarlos, uno de ellos dice: “Con el PRI-AN al menos calificábamos a Octavos (de final, de la Copa del Mundo)”, el otro es una especie de contestación diciendo: “Pero la verdad eso pasó porque la FMF no es administrada por la SEDENA”.

 

Ya no queda más que reírnos de nuestra desgracia futbolística.