Tres razones para leer clásicos

Por: Jolie López

Durante las últimas columnas hemos hecho mención de varias colecciones que han estado circulando en México en varios puestos de revistas. Ambas colecciones (Grandes Novelas de Aventuras y Novelas Eternas) están conformadas por clásicos universales. Mucha gente se ha dejado llevar por la emoción de obtenerlos, y la edición de los mismos. En consecuencia, han surgido mucho debate alrededor sobre qué tan bueno es leer clásicos y si es recomendable para aquellos que no han tenido un primer acercamiento.

Conocer la manera de pensar de cualquier época
Los libros clásicos abarcan un periodo en específico y suelen reflejar el cómo se vestían y los estándares de la sociedad.
Mediante una historia entretenida es posible aprender historia y realizar un análisis sobre las costumbres de un periodo histórico en específico. En ocasiones, puede servir como una herramienta adicional para quienes quieren aprender este tipo de temas de una manera más divertida.

Los clásicos son referenciados en obras actuales
En los libros más modernos se hacen frecuentemente referencias sobre los clásicos. Hay veces donde se describen escenas donde un personaje se encuentra leyendo un libro o se hacen menciones a lugares, símbolos o personajes de otras obras literarias.
Un ejemplo claro es cuando se hizo esta clase de referencias en los libros de “Crepúsculo”: Cumbres Borrascosas y Orgullo y Prejuicio fueron las obras mencionadas; incluso se llegó a realizar una edición de Cumbres Borrascosas que hiciera juego con la saga “Crepúsculo”. Cabe mencionar que muchas de las personas que leyeron la saga, se introdujeron en los clásicos por la curiosidad.
Por la misma razón, es de vez en cuando, buscar los títulos que crean que sean mayormente mencionados en su día a día, porque a veces las mismas referencias nos dan un indicio de lo que podríamos encontrar en el desenlace de una historia. Tal es el caso de “Bajo la misma Estrella” de John Green donde se hace un simbolismo con la luz verde que ve uno de los personajes en “El Gran Gatsby” significando lo mismo en ambas obras: “la esperanza”.
También es importante tener cuidado con las referencias, puesto que en ocasiones las mismas nos pueden adelantar eventos importantes que suceden en los clásicos (como sucede en “El incidente del Perro a Medianoche”, si no han leído los libros de Sherlock Holmes, es probable que es les arruine la sorpresa de algunos eventos ocurridos en algún libro de este famoso detective).
Entonces, entre más clásicos lean, es más probable que entiendan los simbolismos, metáforas, entre otros.

Historias atemporales
La última razón puede que choque con la primera que mencionamos en un principio. Sin embargo, la historia principal y el motivo por el que se mueven los personajes, ha hecho que muchos lectores se sientan identificados con la obra en general, provocando que lo recomienden y lo vuelvan a leer; demostrando que con el pasar de los años, las historias han prevalecido y que siguen dando de qué hablar.
Prueba de ello, son las historias que se han adaptado a la era moderna como la película “Juegos Sexuales” de la década de los 90, siendo una versión de “Las Amistades Peligrosas” escrita por 1700. Por otro lado, (dentro de la misma década) tenemos “Ni idea” que viene a ser una adaptación de “Emma” de Jane Austen publicada por primera vez en 1815.

En cierto modo, los clásicos es algo que no deben de perderse. Son historias que siempre se están recordando y que darán de qué hablar por muchos, muchos siglos más.