La Autonomía de Gestión Escolar
Por Sandra Ortiz y Artemio Ríos*
En 2010 empezamos a dar apoyo técnico pedagógico sistemático a la escuela telesecundaria Frida Kahlo, de la comunidad de Guadalupe Victoria en Perote.
Desde años antes existía un colectivo escolar de tres maestras que no se habían cambiado de centro, a la fecha dos de ellas siguen siendo la base del personal docente.
Iniciamos con el pilotaje de un programa federal para la mejora del logro educativo. Trabajábamos en la formación de redes de tutoría considerando a la escuela como una comunidad de aprendizaje. Hay quienes piensan que la escuela no ha avanzado porque no gana, continuamente, concursos de ortografía o matemáticas. Sin embargo, la apuesta ha sido a que todos aprendan, a abatir el rezago, a incorporar a las madres de familia al estudio y no ha tener uno o dos alumnos que le puedan dar brillo a la escuela.
Al paso de los años se han ido integrando las madres de familia al estudio de temas académicos, a la lectura de libros de las bibliotecas escolar y de aula. Esto ha propiciado que los últimos tres años se hayan realizado festivales comunitarios de aprendizajes compartidos. Es decir, salir al parque de la comunidad a estudiar y celebrar con las señoras de la comunidad. Este año las señoras escribieron reseñas, biografías breves y poesías con el apoyo de sus hijos. Los muchachos ya había sido habilitados para poder tutorar a sus mamás en las tareas de escritura.
En ese marco, “Poesía en Rotación” abrió el festival. Leímos con la comunidad. Las señoras y sus hijos pasaron al micrófono y leyeron en voz alta poesía universal. La emoción y el nerviosismo eran notorios, pero al final la satisfacción permeaba en el ambiente.
Esto ha sido posible gracias a que la escuela ha decidido darle continuidad a un trabajo académico, iniciado hace años; además, el hecho de hacer a un lado la programitis de la Secretaría de Educación. Esta es la autonomía de gestión: tener proyecto, apropiarse de él y desarrollarlo como un esfuerzo de mediano o largo aliento. No ir tirando esfuerzos por la borda en aras de modas pasajeras que se presentan como mágicas soluciones a la problemática que enfrenta la educación en los centros escolares.
*Columnistas.