El Periodismo en México

POR: Mario Mijares*

Ciro Peraloca (Gyro Gearloose) es un personaje ficticio creado por Walt Disney Company. En el comienzo, apareció en historietas como amigo del Pato Donald. El Ciro actual, se hace la víctima y sus repetidores van contra AMLO.

El Maestro José Guzmán Urióstegui (historiador, investigador, escritor) nació en Cerro Alto, municipio de Teloloapan, el 30 de octubre de 1961. Obtuvo la licenciatura en historia en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM (1989). En la misma institución cursó la maestría en Historia de México. En 2005 editó un pequeño libro, Memoria de Merolico, Edit. Los Reyes, 2005, el cual es recomendable para leer este fin de año.

Antes de hablar un poco sobre el personaje central, en la página 26 habla sobre la opinión pública en México de los años de 1879, en la época del famoso Joaquín de la Cantolla y Rico, quien por medio del Globo Vulcano intentaba ascender al espacio de la Ciudad de México, con las consabidas críticas y burlas correspondientes de los periodistas, a quienes les respondió con la ingeniosa frase de “ignoro las burlas de los imbéciles”.

José Guzmán escribe que Merolikos desde su llegada a México fue centro de ataques y burlas, sobre todo porque hablaba mucho. Atinadamente señalaba que el mejor sitio para encontrar a los simuladores está en las redacciones de los periódicos y en el Congreso, por ser pruebas palpables de cómo se puede vivir del presupuesto.

El mismo personaje (de ascendencia polaca) señaló que en México no hay opinión pública, pues salvo en raras excepciones los que se dicen periodistas no se preocupan ni del entendimiento ni la consciencia, ofreciéndose al mejor postor de manera cotidiana, al que exigen un mayor precio en tiempos electorales. Sin duda, con personas vendidas es difícil encontrar un país donde la carrera del periodismo haya llegado, como decía Samson, a un grado más alto de decadencia.

La misma crítica continúa siendo válida después de 140 años, sigue repitiéndose la misma dinámica descrita por él: un Congreso en donde diputados y senadores se distinguen no sólo por su ignorancia, necedad y muy poca disposición al trabajo, sino por cambiar de disfraz en el guardarropa de la Tesorería. Son tan malos, afirma Meroliko, “que el buen pueblo espera mucho más de mi magia que de las píldoras venenosas que se fabrican en los laboratorios de donde salen las leyes de contribuciones y la suspensión de las garantías del pueblo”.

La reflexión es que hoy día con el Nuevo Proyecto de Nación se pueda lograr un avance significativo en cuanto a regular la desinformación que se propaga asiduamente a través de los medios masivos de información, donde sus vocingleros representan a los bisnietos de aquellos a los que se refirió Meroliko.

*Rector del Colegio de Veracruz.