UV cuenta con Grupos de Ayuda Mutua para estudiantes

• En las cinco regiones universitarias operan 50 GAM para la atención de la salud mental de la comunidad  
• Son coordinados por el Centro para el Desarrollo Integral de los Universitarios 
• A raíz de la pandemia, los estudiantes mostraron problemas de ansiedad, depresión, soledad y falta de ubicación 

 

La UV cuenta con Grupos de Ayuda Mutua para atender la salud mental de sus estudiantes

 

Claudia Peralta Vázquez 

Fotos: Cortesía Cendhiu, César Pisil Ramos (2) y Claudia Peralta (3)

03/12/2023, Xalapa, Ver.-  La Universidad Veracruzana (UV), a través del Centro para el Desarrollo Integral de los Universitarios (Cendhiu), puso en marcha, a partir del presente año, el programa de Grupos de Ayuda Mutua (GAM), de los cuales operan alrededor de 50 en las cinco regiones universitarias. 

Jorge Sánchez Mejorada Fernández, coordinador del Cendhiu, dio a conocer que se trata de grupos de apoyo emocional dirigidos a estudiantes de nivel Licenciatura, Técnico Superior Universitario (TSU) y posgrado, facilitado por académicos y personal del organismo que lidera, capacitados en la metodología de los GAM. 

 La estrategia surgió a raíz de la pandemia por la COVID-19, cuando se registró –al regreso a la normalidad– una alta demanda en materia de atención psicológica con diferentes problemáticas de ansiedad, depresión, falta de ubicación, soledad, incluso casos de intento de suicidio entre la comunidad estudiantil. 

Por lo anterior, se recurrió a una metodología propuesta por la Organización Mundial de la Salud desde hace más de dos décadas, consistente en integrar a estos grupos al primer nivel de atención o centros de salud como una estrategia sumamente útil. 

Enfatizó el desarrollo de este tipo de abordajes, sobre todo en países como España. En México no existen muchas experiencias documentadas. 

“Lo que hemos hecho es adaptar esta metodología a la UV, al espacio de los universitarios, se trata de una estrategia para apoyarlos desde el punto de vista emocional, fundamentalmente.” 

Jorge Sánchez Mejorada dio a conocer que el año pasado, con el apoyo de pasantes del programa educativo (PE) de Medicina, se introdujo una práctica de atención psicológica entre los universitarios, la cual aportó importantes datos sobre situaciones urgentes y complicadas.  

Tan sólo, la Encuesta Percíbete 2022 que aplica la UV cada cinco años (en la que participaron cerca de 20 mil estudiantes), comparada con la previa de 2017, antes de la pandemia, mostró claramente un aumento significativo de cuadros de ansiedad y depresión en los estudiantes. 

El psiquiatra señaló que dicha situación ha impactado en la continuidad de los estudios de los jóvenes. Incluso, a través del Programa de Educación Inclusiva, a cargo del Cendhiu, se han atendido casos que requieren de un abordaje particular en lo que respecta a sus experiencias educativas. 

Igualmente, se ha optado por darlos de baja de algunas de ellas y realizar una serie de ajustes para evitar la deserción escolar. 

“El procedimiento es que las facultades solicitan un diagnóstico para poder sustentar –desde la perspectiva médica y psicológica– y hacer los ajustes convenientes, con el fin de disminuir los casos de bajas definitivas, y al mismo tiempo proteger su vida y salud.” 

Expuso lo que esta condición representa para los jóvenes, porque además de la ansiedad y depresión deben atender su carrera académica y lidiar con la presión escolar. 

“Hay que romperlo ocupándonos de su salud, y al mismo tiempo de su educación.” 

Jorge Sánchez Mejorada Fernández, coordinador del Cendhiu, dio a conocer el trabajo realizado a través de los GAM

En torno al incremento de los cuadros de ansiedad y depresión, el galeno enfatizó que éste ha sido del 30 o 40%. 

Ahí radica la necesidad de implementar los GAM, cuya función inició el semestre pasado con un par de experiencias piloto, y se concretó entre septiembre y octubre del año en curso. 

Previo a ello, se dieron a la tarea de capacitar a tutoras y tutores de la UV, porque la estrategia de los GAM no está diseñada para que, particularmente, un especialista de la salud mental los opere. 

Gracias a una alianza con el sistema institucional de tutorías, el semestre pasado se logró la capacitación de alrededor de 105 docentes y personal de confianza, a través de un curso del Programa de Formación de Académicos. 

De ellos, el 70% ha tenido la disposición de abrir los grupos y otros de hacerlo en duplas, es decir, dos facilitadores al frente, lo cual también es una buena estrategia. 

“Necesitamos impulsarlo desde una estrategia institucional, desde las autoridades, para que permee un poco la idea en todas las facultades, es importante para la atención de los alumnos”, agregó Jorge Sánchez Mejorada. 

 

“Estamos volteando hacia las necesidades de los jóvenes” 

Rodolfo Armas Gómez, psicólogo del Cendhiu y coordinador de los GAM, subrayó que el concepto de ayuda mutua siempre ha existido en los ámbitos familiar, religioso, laboral, médico, entre otros, mas no en el estudiantil. 

En este sentido, la UV es pionera a nivel nacional, al no haber un modelo similar en alguna otra institución de educación superior. “Estamos atendiendo esta necesidad de salud mental para nuestros estudiantes”. 

Destacó el fortalecimiento de dicha estrategia a través de la difusión, con el fin de que los jóvenes tengan conocimiento de que existe un espacio de apoyo donde pueden externar, verbalizar y recibir retroalimentación, siempre en un clima de aceptación positiva e incondicional. 

No criticar, no juzgar, escuchar empáticamente y retribuir con refuerzos, son las reglas de la metodología donde se reciben –de forma gratuita– entre ocho y 15 estudiantes por grupo, aunque siempre está abierto a más integrantes. 

Informó que en las cinco regiones universitarias hay 50 GAM, de los cuales operan actualmente 26, y 24 están por iniciar funciones. Xalapa tiene 13, Veracruz 14, Coatzacoalcos-Minatitlán ocho, Orizaba-Córdoba dos y Poza Rica-Tuxpan 13. 

Explicó que los GAM están catalogados como grupos de atención primaria y de contención, no son terapéuticos; principalmente, tienen el propósito de mitigar la ansiedad, depresión, el estrés y visualizar los intentos de suicidio. 

Incluso, al momento de conformar estos grupos se detectaron algunos casos que ameritaron ser canalizados con un psiquiatra o médico especializado. 

“Aquí se crea un círculo real en donde cada participante, de forma voluntaria, comparte y verbaliza su problemática. Se escuchan empáticamente, y si es el caso de que alguien ya lo haya vivido y supo resolverlo, comenta y retroalimenta.” 

De esta forma se refuerzan los vínculos y se encuentran soluciones a problemáticas, es decir, se mitiga y reduce el nivel de estrés, aseveró. 

Cada sesión tiene una duración de 90 minutos, una vez a la semana. Para ello, cada Facultad proporciona un espacio donde los usuarios se sientan tranquilos, a gusto y seguros. La función de los facilitadores es acompañar el proceso con la experiencia que tienen en el manejo de la salud mental. 

Rodolfo Armas Gómez, psicólogo del Cendhiu y coordinador de los GAM

Nadia Paola Cerón Nieto, alumna de noveno semestre del PE de Ingeniería Química, narró que en su primer acercamiento con el GAM sintió miedo, no esperaba mucho del grupo por una experiencia que tuvo fuera de la UV, ya que al solicitar ayuda a personas cercanas a su entorno no recibió la respuesta que necesitaba. 

Afortunadamente logró integrarse rápidamente, pues recibió el aliento que necesitaba en ese momento. “Me sentí respaldada, y de esa manera no caí en algunas cosas que tenía en la cabeza”. 

Conforme transcurrieron las sesiones, comprendió que las personas minimizan los pensamientos y sentimientos de los demás. “En este grupo podemos sentir que hay personas empáticas”. 

 A un año de haber iniciado el proceso, comentó que a pesar de sus compromisos escolares se da el tiempo de acudir a las sesiones porque sabe que es importante y benéfico para su salud mental. 

“Es un buen avance, siento que puedo apoyar a más estudiantes contándoles mi experiencia y puntos de vista de cómo lo superé y por lo que pasé. 

”Los GAM son una buena estrategia, pero se puede mejorar con el apoyo de las autoridades, académicos y los mismos estudiantes.” 

Instó a sus pares a pedir ayuda antes de tomar una decisión errónea o de abandonar sus estudios: “Aunque la mayoría te dé la espalda, siempre habrá alguien que te apoyará, no está de más pedir ayuda al grupo”. 

En tanto, Adhara Álvaro Chávez, de la Facultad de Ingeniería Química, hizo una pausa en sus estudios por recomendación del área psicológica del Cendhiu, para llevar un mejor proceso y seguimiento de su tratamiento. 

Luego de sufrir un ataque de ansiedad en las instalaciones de la Facultad, Adhara ingresó a los GAM. “He tenido una buena experiencia y aprendizaje, me costaba convivir o estar cierto periodo de tiempo con las personas sin que me estresara o sintiera ansiosa”. 

Compartió que expresar sus problemas y emociones resultó difícil, así como entender a otras personas. Poco a poco ha reflexionado y aceptado su situación y necesidad de buscar ayuda. 

“Sentía que me podían juzgar, pero fue un recibimiento muy amigable, hice amistad con otras personas.” 

Con la presencia de adultos solía mostrarse nerviosa, no así con sus pares, pues con ellos se siente identificada al enfrentar un proceso similar y desarrollarse en el mismo entorno escolar. 

Durante la pandemia la situación de Adhara se agravó, fue un proceso difícil al dejar de convivir con el exterior y con las personas. 

“Me aislé mucho y al momento de salir al exterior me asustó ver mucha gente en un entorno muy grande, tuve mucho miedo.” 

También, exhortó a sus compañeros a buscar ayuda: “Tengan la confianza de que no serán rechazados, por el contrario, serán bien recibidos, no se les dejará solos y se les apoyará en la situación por la que estén atravesando”.