Universidad Veracruzana: Diabetes, ventana de oportunidad para repensar estilos de vida
El ciclo de vigilia tiene un gran impacto en el desarrollo de esta enfermedad y otros padecimientos, afirmó José Enrique Meza, del Centro de Investigaciones Biomédicas
- UV realiza simposio en el que se impartirán conferencias magistrales y talleres a cargo de distintos especialistas del tema
La diabetes es un padecimiento provocado por diversos factores que sigue incrementándose entre los mexicanos, ello hace crucial generar espacios académicos para su atención y compartir experiencias de investigación, expresó Roberto Zenteno Cuevas, titular de la Dirección General de Investigaciones (DGI) de la Universidad Veracruzana (UV), al inaugurar el 11 Simposio Internacional “Enfoque multidisciplinario de la diabetes”.
El evento, que abarca los días 11 y 12 de noviembre, con sede en la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI), es organizado por el Laboratorio de Biomedicina, la comisión de seminarios del Instituto de Investigaciones Biológicas (IIB) y el Cuerpo Académico (CA) Horticultura y Calidad Poscosecha, en el marco del 80 aniversario de la UV y del Día Mundial de la Diabetes, que se celebra el 14 de noviembre.
El titular de la DGI recordó su participación como ponente en sus primeras ediciones y reconoció que la presencia de la diabetes sigue incrementándose en México, con el 10% de la población enferma, representando alrededor de 11 millones de habitantes.
Esto conlleva un grave problema a los servicios de salud nacional, que además es una de las primeras causas de muerte, sólo debajo de los padecimientos cardiovasculares, a tal grado que la diabetes mellitus ha sido nombrada como “la peste dulce”.
María Luisa Moreno Cortés, investigadora y encargada del Laboratorio de Biomedicina del IIB, dijo en la bienvenida que una de cada diez personas convive con la diabetes y otras tantas sobrellevan sus complicaciones, no obstante, la diabetes representa una ventana de oportunidad para redirigir los estilos de vida.
Señaló que las actividades están pensadas para ofrecer herramientas a quienes padecen o acompañan el curso de la enfermedad con una serie de conferencias y talleres impartidos por expertos en varias disciplinas.
En la inauguración estuvieron: Eduardo Morteo Ortiz, director del IIB; Martha Lucía Baena Hurtado, coordinadora de la comisión de seminarios y difusión del instituto; Blanca Elizabeth Cortina Julio, investigadora del IIB; Elia Nora Aquino Bolaños, coordinadora del CA.
A continuación, las actividades iniciaron con la conferencia magistral “Diabetes y envejecimiento, cómo reducir sus efectos a través de la cronobiología”, que impartió José Enrique Meza Alvarado, académico del Centro de Investigaciones Biomédicas de la UV.
El ciclo sueño-vigilia afecta varios ritmos del cuerpo humano: metabólicos, fisiológicos y conductuales; por tal motivo, se realizan investigaciones de laboratorio que buscan analizar los factores que alteran este ciclo, así como sus consecuencias en los mamíferos, principalmente roedores, para poder extrapolarlos a la respuesta de los humanos.
Precisó que el ritmo circadiano es el ciclo de cambios que experimentan todos los animales en un periodo de 24 horas y está relacionado directamente con la luz de día y la oscuridad, que provocan cambios hormonales, químicos y moleculares; en ese sentido, sus alteraciones generan consecuencias que afectan a su vez el sueño y la alimentación.
En los humanos, el hipotálamo, agrupación de neuronas del tamaño de un grano de alpiste, es donde el cuerpo recibe y procesa los estímulos de la luz que recibe de las células en las retinas, programando así la producción de hormonas que, a su vez, regulan los ritmos corporales.
Resultados en pruebas de laboratorio ya clásicas, realizadas hace más de cuatro décadas con ratones, han comprobado que alterar los ciclos luz/oscuridad y la alimentación generan trastornos en los animales: aquellos que se alimentan de día, cuando son biológicamente nocturnos, generan obesidad, y aquellos que tienen un ciclo de luz/oscuridad interrumpido llegan a desarrollar hipertensión.
Meza Alvarado advirtió que el envejecimiento y extender nuestros horarios de vigilia genera una reducción en las emisiones de hormonas como el cortisol y la melatonina, a lo que si se suma la falta de actividad física y ejercicio son condicionantes del desarrollo de enfermedades, entre las que la diabetes ocupa de los primeros lugares a nivel mundial y nacional.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió en 2020 que el número de personas con 60 años superó al de niños menores de cinco años; también, que el ritmo de envejecimiento es mucho más rápido que en el pasado y esto genera una condición de alerta para los sistemas de salud nacionales, pues deberán atender a un mayor número de habitantes con enfermedades crónicas como la diabetes y la hipertensión.
Exhortó a los jóvenes presentes a buscar regular su ciclo de sueño-vigilia ya que el impacto de dormir menos de seis horas se irá reflejando conforme crezcan, además recordó que la fase de sueño ayuda al cuerpo a regenerarse y mantener un metabolismo estable.
David Sandoval Rodríguez
Fotos: César Pisil Ramos