Aventurarse al otro lado del espejo
Eduardo Remedi falleció el 6 de febrero en la ciudad de México, donde residía desde hace más de 30 años. Era egresado de la Escuela de Ciencias de la Educación de la FFyH y profesor del Departamento de Investigaciones Educativas del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional. [10/02/2016]
Eduardo Remedi (1949-2016), cordobés, egresado de la Escuela de Ciencias de la Educación de nuestra Facultad y actualmente Profesor del DIE-CINVESTAV, forma parte de un colectivo de profesores argentinos que desde México, país que cobijó a innumerables exilados de nuestro y otros países latinoamericanos, ha constituido un espacio de referencia intelectual que nos puso a pensar, una y otra vez, diversas aristas de la vida académica, institucional y política.
Tempranamente en los años ochenta, sus trabajos junto a Alfredo Furlán acerca de la metodología en la formación docente en el nivel superior trajeron nuevos aires que rápidamente fueron asimilados a los esquemas de pensamiento y acción y a los espacios de formación, como en nuestro ámbito, en la cátedra Metodología, Observación y Práctica de la Enseñanza –hoy Práctica y Residencia- de la mano de Gloria Edelstein. Su libro La Identidad de una actividad: ser Maestro, aún forma parte de nuestras lecturas obligadas y apasionantes. Dialogó y discutió con autores curriculares clásicos, como Tyler y Jackson, siempre respetuoso de los aportes, siempre abriendo lugar a la diferencia.
Posteriormente los trabajos de Eduardo Remedi se concentraron en las producciones fraguadas en el límite de disciplinas -Pedagogía, Psicoanálisis, Sociología- para andamiar los abordajes del análisis institucional, de la intervención en instituciones educativas, del arduo y comprometido trajinar para la comprensión de trayectorias y prácticas situadas. El libro sobre Instituciones Educativas plasma y deja testimonio también de la trama de relaciones que Eduardo construyó allá y acá, entre México y Argentina.
Colaboró con diferentes instituciones universitarias para la revisión y puesta en marcha de planes de estudio, desde su particular lugar de asesor, con una mirada respetuosa de sujetos e instituciones, preocupado por mitigar los sufrimientos y por esperanzar a los más nuevos. Entre sus intervenciones en uno y otro lugar, solo mencionamos el enorme aporte a las Escuelas de la FFyH y a la Universidad Pedagógica Nacional de México. También en nuestra Universidad fue formador temprano de innumerables estudiantes de la Maestría en Investigación Educativa del CEA, de Pedagogía y del Doctorado de la FFyH, prestigiando asimismo esos cuerpos académicos.
Construyó lazos institucionales y personales con colegas de la Universidad de Buenos Aires, La Plata y el sur del país, que se concretaron en encuentros permanentes, direcciones de tesis, coordinación de estancias académicas
El libro Decires de María Saleme, no hubiera sido posible sin la preciosa entrevista que Eduardo Remedi y Justa Ezpeleta realizaran en México, y por la que se hacen comprensibles líneas de filiación y legados, de ese extenso tejido territorial y de pensamiento que ayudó a consolidar.
Quizás es en Detrás del murmullo, Vida político-académica en la Universidad Autónoma de Zacatecas 1959-1977 ,-su tesis doctoral- donde se pueden apreciar con detalle, los afanes teóricos, metodológicos, políticos de Eduardo; el sentido de adentrarse en lo institucional y sus historias: “Restablecer las fuerzas, instaurar el diálogo, aceptar la diferencia, reparar el sufrimiento es, en primer lugar , admitir aunque resulte doloroso que esto sucedió, que debemos apegarnos a reconocer esta historia acaecida como nuestra. Es retomar la palabra excluida, sosteniendo una mirada al pasado que agudiza la visión de las cosas del mundo actual, permitiendo que la vida se exprese. Liberando a los sujetos institucionales que identificando su pasado desempeñen una historia distinta, que los aventure al otro lado del espejo.”
Eduardo ha investigado junto a Sylvie Didou, particularmente en los últimos años, trayectorias de científicos, prácticas y procesos de institucionalización y en ese marco movilizó encuentros, reuniones, seminarios con estudiosos de diversos países de América Latina y Europa que promovieron acercamientos y discusiones de gran fertilidad académica y produjeron lazos institucionales y personales perdurables.
Justamente, en el libro De la pasión a la profesión: Investigación científica y desarrollo en México, Eduardo y Sylvie, plantan bandera, exponen un enfoque y un tratamiento de trayectorias, sujetos e instituciones científicas, desde aristas escasamente exploradas.
Su último viaje a la Argentina, nos encontró en Buenos Aires presentando el libro de Adela Coria, Tejer un destino. La formación de pedagogos en la Universidad Nacional de Córdoba 1955-1976, trabajo que recupera la tesis de doctorado de Adela que él dirigiera en el Departamento de investigaciones Educativas del CINVESTAV, en la Ciudad de México. El libro -que Eduardo prologa- constituye sin dudas, una conversación y reflexión que aún no cesa sobre el campo pedagógico, la ciudad de Córdoba, la universidad, nuestra Facultad y nuestra Escuela de Ciencias de la Educación, los avatares generacionales y el tiempo presente.
Eduardo era un gran conversador, un amigo presente, un gesto educador, que como tal, siempre, siempre, remitía a los textos –teóricos y muchos de ellos literarios-, esos que leía voraz y apasionado, y pasaba con tanto entusiasmo y generosidad, como todos reconocen.
Sabía disfrutar de la vida, de los recorridos por ciudades y sus rincones. Se inspiraba y era poeta de sus andanzas. También era chinchudo y gritón; muy exigente como acompañante seguro de los innumerables jóvenes tesistas, de los investigadores que formó. Le gustaba tomar mate con su termito Lumilagro y tés de yuyos serranos.
Profesores, estudiantes y egresados de la Escuela de Ciencias de la Educación y
de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba.
10 de febrero de 2016.