Coca-Cola enfurece y despide al repartidor que rellenaba botellas en la calle
Coca-Cola Femsa anunció que uno de sus trabajadores fue captado rellenando botellas de vidrio de forma clandestina.
Luego que se viralizara un video en el que se observa a un repartidor de Coca-Cola rellenando de manera clandestina botellas de vidrio, la empresa Femsa se pronunció al respecto y con su política de tolerancia cero anunció el despido del empleado.
¿Qué sucedió?
Por medio de un comunicado, Coca-Cola Femsa anunció que uno de sus trabajadores fue captado rellenando botellas de vidrio de forma clandestina, por lo que decidió separar del cargo a dicho trabajador.
Además, la empresa precisó que se enteró del caso que se hizo viral; pero, afirmó que está en contra de estas prácticas ajenas a su operación ya que va en contra de sus estrictos estándares de salubridad y calidad nacionales e internacionales.
“Debido a esta reprochable e inaceptable conducta, el colaborador fue inmediatamente separado de su cargo. Ratificamos nuestra posición de absoluta reprobación en contra de cualquier actividad que ponga en riesgo la salud de nuestros clientes y consumidores”, detalla en el comunicado.
Garantía de calidad
Aunado a ello, Coca-Cola Femsa afirmó que tiene el firme compromiso de garantizar la seguridad e integridad de sus clientes así como de llevar al mercado su portafolio de productos con empaques debidamente sellados.
Además, no es la primera vez que la empresa se encuentra envuelta en algún tipo de polémica pues el mes pasado se halló en Iztapalapa una fábrica clandestina de la marca.
¿Qué hizo el trabajador?
En redes sociales circuló el video de un trabajador de Coca Cola que rellena las botellas sucias de refresco en su camión, para venderlas otra vez en las tiendas, como si fueran botellas nuevas y selladas de fábrica. El trabajador no se dio cuenta que estaba siendo grabado por un vecino.
En las imágenes se observa que el trabajador, quien trae puesto el uniforme de Coca Cola, rellena con un refresco de 3 litros los envases de vidrio de 600 mililitros, los cuales regularmente se venden en restaurantes o puestos de comida.
El video fue grabado y subido a redes sociales por la joven Fabiola Durán, quien denunció públicamente que ya había reportado esta situación poco higiénica.
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