Pascoe, Camín, Krauze: los vendedores de Xóchitl
Héctor M. Magaña
Fabrizio Mejía Madrid en su video-columna de Sin embargo comenzó con tres citas de tres personajes del mundo político e intelectual que en diferentes periódicos decidieron apoyar a la candidata Xóchitl Gálvez. Se trata de Ricardo Pascoe, Héctor Aguilar Camín y Enrique Krauze. Los apoyos rayaban en lo hagiográfico, en lo acaramelado y, por su puesto, en lo inverosímil.
Naturalmente, la columna de hoy trata de como los medios de comunicación intentaron crear un perfil maravilloso de una política maravillosa con un destino igual de maravilloso. ¿Quién es Andrés Manuel López Obrador para estos autores? Un político cuyo discurso siempre pecó de simpleza. Nuestros tres comentadores no perdonan que un presidente use un discurso repletó de mexicanismos. Un lenguaje que, tal parece, funge como mecanismo de ruptura (divide a los “buenos ciudadanos” de la “masa supersticiosa e ignorante”). Xóchitl es entonces “la conciliadora”: ¿la conciliadora de qué? Tal parece que de todos. La política de Xóchitl es los suficientemente trivial y laxa para amistar pobres y ricos, conservadores y liberales, privilegiados y desfavorecidos, trabajadores y flojos. “Así, debe creer que Hidalgo, Juárez, Zapata, Madero, Villa, Lázaro Cárdenas iban por la vida amistando con los españoles, los conservadores imperialistas, los porfiristas, las compañías petroleras extranjeras. Según él [Krauze], todos los momentos decisivos de nuestra historia serían producto de contentar a todos, avenirlos, y exhortar a que congeniaran unos con otros”.
No obstante, las premisas plasmadas en el papel no parecen reflejar la realidad. Desconocemos si hubo una verdadera comunicación entre ella y su “personal de relaciones públicas”, pero en todo caso las acciones de la senadora esquivan los elogios y halagos que tratan de elevarla. Su comportamiento entre errático y bufonesco tal parece que ya ha cansado a la población: “Xóchitl Gálvez es desconocida para la mitad de los electores, según la encuesta domiciliaria de Enkoll, la encuestadora de W Radio y el diario español El País. Pero, mucho más grave, tiene más opinión negativa que Samuel García, Dante Delgado o Eduardo Verástegui. 32 por ciento piensa mal o muy mal de ella. Sólo 28 por ciento votaría por ella.”
La domesticación de los medios a los políticos se basa en la cuidadosa observación de su discurso. AMLO y Xóchitl: los dos con un discurso único. El primero peca de sencillez, mexicanismos que se dirigen a una mayoría “supersticiosa e ignorante”. La segunda con un lenguaje fresco, “natural”: “con ese lenguaje impostado de naturalidad sobre todo ahora que Xóchitl lee todo, hasta las groserías, de una tarjetita que le escriben. Ella es la salvaje controlada por la élite.” Ambos no han podido ser domesticados, pero Xóchitl, es la salvaje idealizada por Montaigne y Chateubriand; AMLO el “caníbal” de Juan Ginés de Sepúlveda.