El Colegio de Veracruz a la vanguardia; innova Museo de la lectura
POR: Mario Raúl Mijares Sánchez*
En Estados Unidos eliminan presupuesto a bibliotecas, dañando a un gran porcentaje de cierre de bibliotecas públicas. Esto se dio el día de ayer donde la Cámara de Representantes de Misuri, “aprobó eliminar el presupuesto del Estado los recursos para las bibliotecas públicas”. Véase La Jornada, (viernes 14 de abril 2023, 2ª página). Lo anterior sin duda es un tema que poco se ha atendido. En un estudio estadístico reciente se demuestra que los jóvenes e incluso los mayores de edad ya no visitan las bibliotecas, pues han perdido interés. Así, en virtud de estas circunstancias, en los últimos días ha surgido una gran propuesta de manos de nuestro catedrático Lorenzo León, misma que se llevará a cabo.
El Colegio de Veracruz fundará el Museo de la Lectura, mismo que será un espacio creado para vivir la experiencia de la lectura, en donde, además de promover dicha experiencia, se materialice un ambiente de convergencia que sirva para socializar más allá de los dispositivos digitales en los que viven sumergidas las sociedades contemporáneas, signadas por la revolución digital.
El Museo de la Lectura innovará con la proyección de la biblioteca clásica. Ahora los libros que se encuentren en los estantes no estarán clasificados por materia ni por un índice temático. El catálogo de títulos y autores será una “curaduría” a la manera en que los comisarios seleccionan las obras físicas de artistas disponiendo la presentación en la galería. Aquí se trata de que sean obras que ocupen un lugar en la cultura universal y cuyos autores cultiven el área humanística: la ciencia política, relaciones internacionales, sociología, filosofía, novela, cuento, poesía entre otros más.
El espacio estará integrado por volúmenes rigurosamente seleccionados de catálogos que nos provean o nos den en donación. El Museo de la Lectura contará con volúmenes repetidos, con la idea de que sea posible realizar una lectura compartida o simultánea de los asistentes al museo, con el fin de propiciar un diálogo, como cuando dos o más espectadores contemplan un cuadro.
El concepto de museo que interesa a nuestro espacio refiere a que dicho esfuerzo es la primera tentativa artístico-científica de reunión o educación hacia la unidad, y por eso esta tentativa es una tarea sagrada, es una convocatoria universal, a todos sin excepción, comenzando desde la infancia.
Vivimos la retirada de la lectura física como territorio fundador de la transmisión de conocimiento. El llamamiento que se hace a la población estudiantil para acercarse a la lectura en el soporte de papel es para procurar revertir esta tendencia, pues es una actividad que disminuye y en muchos casos casi desaparece.
Las opciones digitales y el desarrollo de las plataformas de streaming son el pilar indiscutible sobre el que se funda hoy día la humanidad conectada el ciberespacio, cuyo significado refiere a cualquier contenido de medios, ya sea en vivo o grabado, que se puede disfrutar en computadoras y aparatos móviles a través de Internet y en tiempo real. Los podcasts, webcasts, las películas, los programas de TV y los videos musicales son tipos comunes de contenido de streaming, pues facilitan la difusión de contenidos con una facilidad inimaginable, pero absorben la atención desplazando la que antes se dirigía a la lectura.
El Museo de la Lectura será un espacio que nace inserto en la atmósfera de la revolución electromagnética: el tipo movible que inventó Gutenberg en el siglo XVI fue una extensión del manuscrito, una aceleración y una manipulación. En la actualidad, lo que sucede es una mutación de un orden incomparablemente más revolucionario. Apenas estamos empezando a comprender las nuevas formas de sentido, de la comunicación, del almacenamiento de datos.
La Internet, la red, son técnicas que implican una nueva metafísica de la conciencia tanto individual como social. Es una biblioteca ilimitada, una galería de cuadros, un tablón de anuncios y una base de datos a escala planetaria y dentro de poco de acceso planetario.
Definir la red hoy es tarea del más alto pensamiento, pues es enteramente interactiva, permitiendo la formación constante de comunidades de rápida evolución: comunidades de intercambio y de diálogo, pero también de trabajo en colaboración y en concentración. La página web es dinámica, en acción, como ninguna textualidad anterior podría ser.
La revolución digital es para una masa totalmente abierta, sin muros, sin límites, justo para hacer todo lo contrario, encontrar singularidades e imponer límites.
Vivir una permutación tan profunda que significará el paso de lo analógico a lo digital implica adaptarse a un nuevo paradigma.
Este cambio ha puesto a disposición de las nuevas generaciones mucha información con resultados a veces de pérdida o confusión.
A su vez, las generaciones más viejas deben asimilar que el mundo, tal como lo conocieron, está en extinción.
*Mario Raúl Mijares Sánchez es rector del Colegio de Veracruz.