“Estamos saliendo de un trauma colectivo enorme, la pandemia, y la única forma de procesar este trauma es lograr construir, no una nueva, sino una mejor normalidad. En el caso del sistema de salud, representa la construcción de un sistema realmente universal, que garantice el acceso a servicios integrales de alta calidad con protección financiera”, explicó durante su participación en el foro EL UNIVERSAL-SU MÉDICO.
El rector de la Universidad de Miami refirió que el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) agudizó la segmentación de las personas sin seguridad social; pretendió recentralizar la atención a la salud para la población no asalariada, y redujo los beneficios porque sólo cubre primer y segundo nivel de atención.
Señaló que México necesita cinco reformas de nueva generación en el sector Salud: legal, financiera, gerencial, del modelo de atención y participativa, encaminadas a lograr la universalidad en el sistema de salud, y que el Congreso establezca una comisión independiente y apartidista para rediseñarlo integralmente.
“Que se instaure una comisión especial para la reforma del sistema de salud, esto debería hacerlo el Congreso, que es el órgano con un poco más de pluralismo que tenemos, una comisión totalmente independiente y apartidista, que se aboque al rediseño integral del sistema de salud. Esto ya no va a ocurrir en los dos años y pico que le quedan a la administración actual, pero sí es algo que debe empezarse a trabajar ya”, comentó.
Detalló que una reforma financiera tendría que plantear, por lo menos, el nivel promedio de gasto en salud de los países latinoamericanos, alrededor de 7% del PIB, legislar una contribución social generalizada, integrar un fondo único de aseguramiento, y diseñar un paquete común de beneficios al que toda persona tendría derecho, un seguro universal.