Niños regresan a trabajar a las calles de Veracruz
Este año van contabilizados 173 menores que se ganan unos pesos en la vía pública; impulsan acciones en la ciudad para restituir sus derechos
Desde 2019 a la fecha se ha logrado que 13 niñas y niños que trabajaban en situación de calle en Xalapa dejaran de estar en esa condición y les fueran restituidos sus derechos. En estos tres años, se ha identificado en promedio a 214 menores en situación de calle.
La secretaria técnica del Sistema Municipal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna) en Xalapa, Mercy Esther Pérez Arévalo, señaló que muchos de los menores que se observan en trabajo en la vía pública en la ciudad provienen de otros municipios cercanos.
Precisó que, en 2019, en promedio se tuvieron 209 niñas y niños en trabajo de calle de 78 familias, pero se logró que cinco dejaran de estar laborando porque se cubrieron todas las condiciones para poder decir “ya no es necesario que el niño me acompañe a trabajar o que esté conmigo”.
Además, algunos de esos casos se canalizaron para la atención jurídica de existir una omisión de cuidados grave.
En el 2020 hubo una disminución en los primeros meses de la pandemia por el confinamiento, pero a partir de agosto, se incrementó y se detectaron cerca de 262 menores en calles de 102 familias, con quienes se tuvieron mil 476 intervenciones como charlas, gestiones, atenciones médicas, en salud, en alimentación, entre otras. Ese año, siete niñas y niños dejaron de estar en la calle trabajando.
En lo que va de este 2021, se tienen contabilizados 173 niños y niñas de calle de 81 familias, y se ha logrado que una menor, deje de trabajar, “y hay pendiente el trabajo con por lo menos con tres familias que tienen bastantes niños”.
“Esa es la realidad; Xalapa ha impulsado acciones de restitución de derechos con una mirada no criminalizante, muchos de estos niños no viven en Xalapa sino en municipios cercanos como Banderilla, Coatepec, Xico. Son niños que trabajan vendiendo en las calles o acompañando a sus familiares a vender en el trabajo generalmente informal y en los cruceros”, abundó.
Señaló que el pasado 12 de junio, Día contra el Trabajo infantil, es un recordatorio de la complicación que hay a nivel mundial acerca de esta problemática que es histórica y que tiene una serie de diferencias sustanciales en lo que era el trabajo infantil hace 10 años a lo que es al día de hoy.
Señaló que la pandemia por Covid-19 ha generado una serie de condiciones más complicadas para esas infancias;sin embargo, enfatizó que esta es la primera vez que se cuenta con una estrategia formal y un programa dedicado exclusivamente al trabajo de la restitución de los derechos vulnerados de niñas y niños que tienen que trabajar ayudando a sus familias o que son expulsados a laborar.
“La estrategia de prevención de riesgos y protección integral de niñas, niños y adolescentes en calle en Xalapa está teniendo un precedente importante como una acción estatal que si bien han recuperado las miradas de las organizaciones locales, de la sociedad civil con quien se inicia la configuración de esta estrategia y la academia, ahora se ha conformado y consolidado como una política de Estado que busca en primer lugar no criminalizar a las niñas y a los niños ni a sus familias, identificar qué niñas y niños están trabajando como parte de la ayuda a sus familias, qué niños pueden ser víctimas de violencia o explotación de sus familias y tomar determinaciones”, explicó.
Expuso que están realizando un conteo formal de las atenciones que han tenido desde finales de 2018 con los educadores de calle. Detalló que la mayor parte de los niños que están en esa condición, poco más del 50 por ciento, están acompañando a sus familias; del resto, se está haciendo una distinción para saber cuáles están en mayor riesgo de ser explotados por algún familiar, que esté perdiendo lazos familiares y otra situación, sobre todo los de mayor edad.
SITUACIÓN ES MULTIFACTORIAL
Afirmó que hablar de trabajo infantil es complejo porque existe una serie de factores que son causantes de la problemática que se ve, “lo que vemos es a lo mejor al niño en la esquina pidiendo dinero, que anda vendiendo dulces en el centro, pero es el resultado de una serie de vulneración de derechos estructurales”.
Refirió que, para disminuir la problemática con miras a la erradicación del trabajo infantil en un futuro, se requiere de todo proceso porque esto no se termina con un decreto sino con una estrategia que busque incorporar a la familia para ir restituyendo derechos vulnerados de las niñas y los niños, así como a las diferentes dependencias del gobierno y a la propia sociedad.
“Es muy complejo por eso, por desgracia en el mundo llegamos al 2021 todavía con un problema que tiene décadas porque es muy complejo entender todos los factores que intervienen en el hecho de que las niñas y los niños estén trabajando; sin embargo, no tenemos registrados que en el estado y los municipios haya existido, en los últimos 10 años, una estrategia o un programa de estado dedica exclusivamente al trabajo no criminalizante de la pobreza, de las niñas y los niños y sus familias y busque restituir sus derechos y eso es muy importante”, abundó.
*Información de El Diario de Xalapa