«El regalo que las madres deben tener es saber dónde están sus hijos», «Deberíamos estar celebrando a mi mamá, pero estamos buscando a mi papá» son algunas de las frases que se leen en la marcha de este 10 de mayo en que madres y familiares buscan a sus desaparecidos.
«En este panteón hay fosas clandestinas» se lee en una de las pancartas que portan este 10 de mayo en que, aseguran, no tienen nada qué celebrar.
Apostada en las afueras del panteón Palo Verde sostienen que han vivido una doble desaparición por autoridades pues el ocultamiento de la información sobre cuerpos inhumados en el área de fosa común, constituye grandes violaciones a los derechos humanos de las familias desaparecidas.
«Este día no es de fiesta, es de lucha y de protesta» dicen las madres que con playeras blancas donde han plasmado el rostros de sus hijos e hijas, han decidido una vez más salir a las calles para alzar la voz.
Con rosas blancas y fotografías, exigen a las autoridades que la búsqueda no cese y que se cumpla con la ley para encontrar a sus seres amados con vida.
Mientras que al panteón Palo Verde llegan familias con flores para sus madres difuntas, afuera hay familias que están en espera de saber dónde están sus hijas e hijas y que sostienen que allí también hay una fosa clandestina pues hay cuerpos inhumados, pero no tienen carpeta clara para identificarlos.
«La fosa común no es un lugar de resguardo, se convierte en fosa clandestina también y se violentan los derechos humanos de la persona qué está ahí y la familias, ya basta de esto, ya basta de las atrocidades, las autoridades saben el cochinero que hay y por eso no exhuman», dijo María Elena Gutiérrez del colectivo Buscando a Nuestros Desaparecidos Veracruz quien busca a su hijo Rafael Espinosa desaparecido el 15 de agosto de 2013.
Las madres y familias salieron del panteón Palo Verde hacia plaza Lerdo donde se encuentran ya otros colectivos con la misma demanda.
*Información de El Diario de Xalapa
