El mensaje del arte

Por: Renatta Vega Arias

Buscando una definición de arte, encuentro en Wikipedia: “El arte (del latín ars, artis, y este del griego τέχνη técnē) es entendido generalmente como cualquier actividad o producto realizado con una finalidad estética y también comunicativa, mediante la cual se expresan ideas, emociones y, en general, una visión del mundo, a través de diversos recursos, como los plásticos, lingüísticos, sonoros, corporales y mixtos “

Este concepto nos habla de TODAS LAS ARTES que son: Pintura, estampa, escultura, literatura, danza, música, arquitectura y, desde el siglo XX, fotografía y cine. Posteriormente han surgido otras formas de expresión artística, como el performance, la instalación, el body paint, el video, la multimedia y me disculpo si he omitido alguna, pero es que el arte está vivo y no deja de crecer. Sin embargo, en estas notas hablaré de la pintura más que de otras, porque es esta la disciplina que yo conozco y en la que me he desarrollado por más de treinta años, pero seguramente tocaré temas específicos de otras manifestaciones del arte si es necesario, para tratar de convencerlo a usted de que el arte merece muchas oportunidades.

La definición nos dice que una de las funciones del arte es comunicar, expresar ideas y emociones, que nos muestran una visión del mundo ¿de quién? del artista. Sabemos que, para establecer la comunicación, son necesarios: El emisor, el mensaje y el receptor. Pensemos que estamos en una exposición de pintura, donde el emisor es el pintor, el mensaje está en sus obras y el receptor es la persona que los está viendo (el público).

Del concepto se desprende que el arte tiene una “Finalidad estética”. Eso significa que el artista lo hace para transmitir su percepción de un asunto en particular, pero lo hace utilizando los recursos técnicos de su disciplina. Es un lenguaje diferente, el lenguaje del arte.

Por ejemplo, Pablo Neruda le quiso decir a su amada esposa que la extrañaba. Pudo decirle simplemente eso, pero, usando el lenguaje de la poesía, le escribe en su soneto LXV de los Cien Poemas de Amor, publicado por la Editorial Seix Barral:
“Matilde, dónde estás? Noté, hacia abajo,
entre corbata y corazón, arriba,
cierta melancolía intercostal:
era que tú, de pronto eras ausente”
Es decir, se trata de decirlo bellamente, con la intención de “tocar el corazón”.

Al apreciar una obra por medio de sus sentidos y luego establecer esa “conversación”, puede usted conocer la filosofía personal del artista y sentir el poder emotivo que tiene. Y es tan poderoso el lenguaje del arte, que nos puede hacer llorar, reír o enojarnos. No pocos artistas han sufrido persecuciones y represalias por haber manifestado ideas que han logrado estremecer conciencias y corazones, pero de eso ya hablaremos en otra ocasión. Lo importante es que quede establecido que, si usted se acerca al arte, será testigo del trabajo de un ser que tiene algo que decirle y buscó una manera diferente para expresarlo. Un lenguaje estético que busca conmoverlo. ¿Se anima?