Tres libros tiras cómicas para leer

Por: Jolie López

¡No hay que olvidar las tiras cómicas! En ocasiones olvidamos que las viñetas proporcionan conocimiento y entretenimiento en tan sólo un par de ojeadas. 

Esta semana destacamos tres títulos que podrían interesarles y que, si son nuevos en este tipo de lecturas, deberían de leerlos sí o sí. 

Toda Mafalda

Editorial: Lumen

Por qué leerlo:

Considerado por algunos como la representante de la tira cómica en Latinoamérica. Mafalda ha sido traducida en múltiples idiomas y sigue siendo la favorita de todos en habla hispana. 

Tener “Toda Mafalda” debe ser considerado como un indispensable en toda colección de un bibliófilo. 

Quino reflejaba algunas situaciones que ocurrían en el mundo a través de los ojos de Mafalda (hoy en día sirve para leerla como instrumento para aprender historia), pero también el personaje realizaba reflexiones sobre la vida cotidiana de manera humorística. 

No pueden perderse a esta niña que odia la sopa. 

Peanuts

Editorial: Fantagraphics Books

Por qué leerlo:

Peanuts es un clásico americano dentro de las viñetas que vieron la luz en los periódicos. Su personaje más popular es Snoopy; a quien hemos visto en mercancías, animaciones, moda, entre otros.  A estas alturas, ¿quién no conoce a los personajes de Peanuts? En algún punto nos hemos encontrado con productos de la franquicia, las películas o series animadas, entre otros.

Charlie Brown y compañía tienen una manera de ver el mundo muy distinta. El humor que se muestra en cada una de las viñetas es muy propio sobre cómo un niño podría reflexionar sobre una situación en particular. 

La primera aparición de Peanuts fue durante la década de 1950 y su última aparición fue en 1999 (con el fallecimiento de Schulz).  

Calvin and Hobbes

Editorial: Andrews McMeel Publishing (editado en el 2012)

Por qué leerlo:

Bill Watterson es el creador de “Calbvin and Hoobes” convirtiéndose en una de las tiras cómicas más populares del siglo veinte. Las tiras aparecieron en los periódicos desde 1985 hasta 1996 (cuando el autor se retiró).

Con el paso de los años, los dibujos se volvieron todavía más populares por los valores representados en cada una de las viñetas y servir como ejemplo para las generaciones siguientes.