A propósito de lo sucedido en la parroquia de san martín de porres.
La mañana del 16 de febrero de 2020, en su cuenta de Facebook, una madre de familia que aparece con el nombre de Nancy Bucaramanga, dio a conocer que durante la misa de niños en la parroquia de San Martín de Porres de la ciudad de Xalapa, luego de que su hija de 8 años “comenzó a moverse al ritmo de la música”, alguien tocó su hombro y la invitó a salir en tono algo imperativo: “me pide el padre que le diga que no pueden estar aquí si su hija va a bailar”.
La madre de familia señala además que indignada “explicó la situación ante lo cual no hubo comprensión alguna y que por ello optó por salir del templo”. La persona que tuvo este comportamiento e hizo este comentario desafortunado, en “tono imperativo”, fue una persona que sirve en esa parroquia y ya se está atendiendo ese asunto para darle puntual seguimiento.
Como Arquidiócesis de Xalapa, expresamos nuestra indignación ante este tipo de conductas indebidas, inapropiadas e injustificadas por parte de este colaborador laico en esa parroquia; Lamentamos profundamente su comportamiento, daremos seguimiento y ofrecemos una disculpa pública a la señora Nancy Bucaramanga y a su hija por esa conducta que lastima a las personas y ofende la fe de nuestros feligreses.
La Iglesia Católica acoge a todo tipo de personas y tiene en grande estima y aprecio especialmente a los niños a quien Jesús los puso como ejemplo para entrar al reino de Dios; él mismo nos enseña con claridad cómo debemos comportarnos ante ellos: “Dejen que los niños se acerquen a mí y no se los impidan” (Mt 19, 14).
La Iglesia Católica siempre será un hogar donde todos tenemos cabida. Todas las personas son bienvenidas y merecen nuestro respeto y atención; nuestro propósito es servir a todos.
Pbro. José Manuel Suazo Reyes