Glaucoma

Dra. Abigail Bello Gallardo
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El glaucoma es conocido como el «ladrón silencioso de la visión» porque el
paciente no nota cambios importantes en su visión hasta que es demasiado tarde (Leer en: https://www.aao.org/salud-ocular/enfermedades/glaucoma-sintomas).

Otros le llaman ‘el cegador silencioso’.

Es considerado la primera causa de ceguera irreversible, en México (Revisar: https://www.excelsior.com.mx/comunidad/2017/03/14/1151947).

Lamentablemente los pacientes llegan a los consultorios en etapas avanzadas, cuando ya casi perdieron la totalidad de su campo visual.
Se estima que entre el 2 y 4 % de la población mayor de 40 años tiene riesgos de tener glaucoma, pero el 90 % lo desconoce, ya que no hay síntomas ni dolor en la mayoría de los casos (Ver: https://www.elsiglodetorreon.com.mx/noticia/335860.cataratas-responsables-del- 45-de-la-ceguera-en-mexico.html).

Cuando una persona tiene más de 80 años de edad el riesgo de padecer
glaucoma aumenta a 9 %.

El glaucoma es una enfermedad de los ojos que ocurre cuando la presión del líquido que se encuentra dentro de los ojos (humor acuoso) aumenta
gradualmente y termina por inflamar y dañar el nervio óptico (Consultar en: https://nei.nih.gov/health/espanol/glaucoma_paciente).

En las personas que tienen glaucoma, el drenaje del ojo está obstruido, por ello, el líquido se acumula y provoca un aumento de la presión en el ojo (Consultar en: https://es.familydoctor.org/condicion/glaucoma/).

La presión del ojo se mide en milímetros de mercurio (mm Hg). Se considera normal cuando el ojo mide entre 10 y 21 mm Hg, sin embargo, la manifestación o no de la enfermedad, depende de cada persona, no específicamente de esta cifra.

La presión ocular que supere los 22 milímetros de mercurio es un factor
importante para sufrir glaucoma (Leer: https://www.glaucoma.org/es/presion- ocular-elevada-y-glaucoma.php).

Las personas que tienen más riesgo de padecer glaucoma son:
Quienes tienen 60 años o más; padecen diabetes, hipertensión, alguna
enfermedad del corazón; miopía (es difícil ver objetos que están a distancia); y quienes tienen antecedentes familiares de glaucoma, por ejemplo, padres, abuelos o hermanos.

Los medicamentos con corticosteroides, que se indican con frecuencia para tratar las inflamaciones de los ojos y otras enfermedades, pueden desencadenar el glaucoma en algunas personas.

Tipos de glaucoma

-El glaucoma del ángulo abierto es el tipo más común de glaucoma. -Glaucoma de baja tensión o de tensión normal.
-Glaucoma de ángulo cerrado. Los síntomas de este tipo de glaucoma incluyen un dolor severo y náusea, así como enrojecimiento del ojo y visión borrosa. Si el paciente tiene estos síntomas, debe buscar tratamiento de inmediato.

Esta es una emergencia médica.

Si su doctor no está disponible, vaya al hospital o a la clínica más cercana.
Sin tratamiento médico para mejorar el flujo del líquido dentro del ojo, el paciente puede perder la vista en ese ojo, en uno o dos días.
-Glaucoma congénito (los niños que nacen con un defecto en los ojos).
-Glaucomas secundarios.
-Glaucoma pigmentario (se desprende el pigmento del iris y bloquea la salida de líquido).
-Glaucoma neovascular, es un tipo de glaucoma muy severo que está relacionado con la diabetes.

Síntomas

Es posible que al comienzo no haya síntomas. Las personas no llegan a notar que están perdiendo la visión de los lados, pero cada día empiezan a tropezarse más, a tirar las cosas de la mesa y a chocar con su vehículo por el mismo lado (http://www.operacioneslasermiopia.com/el-glaucoma-principal-causa-de-ceguera-en-mexico/).

Rara vez, una persona tendrá un ataque agudo (repentino o a corto plazo) de glaucoma. En esos casos poco frecuentes, el ojo se enrojece y se vuelve muy doloroso. También pueden producirse náuseas, vómitos y visión borrosa.

El especialista adecuado para diagnosticar y tratar los diferentes tipos de glaucoma es el oftalmólogo.

Tratamiento

No hay cura para el glaucoma, pero puede ser controlado.

Sin tratamiento, las personas con glaucoma perderán la visión de los lados. Sentirán como que están mirando a través de un túnel. Con el tiempo, esta visión de túnel (el campo visual) puede disminuir hasta que llegar a la ceguera.

Generalmente los medicamentos son especializados y costosos.

El glaucoma se trata primero, por lo general, con gotas para los ojos. Para aplicarse correctamente las gotas, siga los siguientes pasos:

-Primero, lávese las manos.

-Sostenga la botella boca abajo.

-Incline su cabeza hacia atrás.

-Agarre la botella con una mano y colóquela lo más cerca al ojo que le sea posible (sin tocar el ojo).

-Con la otra mano, jale el párpado inferior hacia abajo. Esto le formará un saco.

-Aplíquese el número de gotas que le recetaron en el saco del párpado inferior. Si usted está usando más de una gota, asegúrese de esperar por lo menos cinco minutos antes de aplicar la segunda gota (siga los mismos pasos anteriores).

-Cierre su ojo o presione el párpado inferior ligeramente con su dedo por lo menos un minuto.

Estos pasos le ayudarán a mantener las gotas dentro del ojo, evitando que drenen por el conducto lagrimal y disminuyendo así, el riesgo de tener efectos secundarios.

Los medicamentos en tabletas o píldoras también se pueden indicar, si las gotas para los ojos solas no ayudan a aliviar la presión dentro del ojo.

Si estos tratamientos no funcionan, es posible que su médico sugiera una cirugía.

En caso de ser necesaria la cirugía, su médico oftalmólogo podría indicar cirugía láser (trabeculoplastia), cirugía convencional, procedimientos especializados o una combinación de cualquiera de éstos.

Sin embargo, no mejorará la vista que ya se haya perdido.

Durante varias semanas después de la cirugía, el paciente deberá ponerse unas gotas en los ojos para evitar la infección e inflamación.

Al igual que con la cirugía láser, la cirugía convencional se hace en un solo ojo a la vez.

Si después de realizarse la cirugía, la nueva apertura para el drenaje se obstruye, tal vez sea necesaria una segunda operación.

Prevención

Afortunadamente, una detección temprana del glaucoma y su tratamiento pueden ayudar a conservar la visión.

Todos los niños deben someterse a exámenes de la visión con su pediatra más o menos en el momento cuando aprenden el alfabeto y luego cada 1 a 2 años después de esto.

Entre las edades de 20 y 39 años:

-Se debe hacer un examen de los ojos completo cada 5 a 10 años.

-Los adultos que usan lentes de contacto necesitan exámenes oculares cada año.

Los adultos de más 40 años que no tengan ningún factor de riesgo, ni enfermedades en los ojos continuas, deben ser examinados:

-De 40 a 54 años de edad: cada 2 a 4 años.

-De 55 a 64 años de edad: cada 1 a 3 años.

-De 65 años en adelante: cada 1 a 2 años.

Sin importar su edad, dependiendo de los factores de riesgo o de sus enfermedades actuales, el oftalmólogo le puede recomendar que se haga exámenes con mayor frecuencia.

En otro asunto, como siempre, insisto en la imperiosa necesidad de que las instituciones de salud en México, eduquen a la población de manera sencilla, breve y frecuente acerca de las enfermedades, y cómo prevenirlas o controlarlas, a través de todos los medios de comunicación masivos; además de promover políticas públicas para lograr la eficiente prevención y control de las enfermedades.

Por último, les invito a ver el programa por Internet ‘Especialistas Médicos al Cuidado de su Salud’.

El próximo viernes, a las 20 horas, nos acompañará en entrevista en vivo, el cardiólogo Eduardo Carreira Pérez, con el vital tema: ‘Angina de pecho’. Lo transmitiremos por: www.emcs.com.mx; y vía Facebook Live por: Especialistas Médicos al Cuidado de su Salud y Revistasinrecreo.com; por Twitter @EMCS_Oficial y en YouTube: Especialistas Médicos